Manuel Guiu Casanova nace en Barcelona y se licencia en ciencias. Para ganarse la vida comienza a dar clases hasta, finalmente, crear la Academia. Así se pone la semilla de un proyecto que cuenta ya con más de 130 años de frutos. Por ello, hoy entrevistamos a su nieto para conocer más en detalle la historia de la Academia Guiu. Manuel Guiu, que actualmente tiene 76 años, nos explicará algunos de los recuerdos que, con más nitidez, rememoran cómo su abuelo le explicó el crecimiento de esta institución
La Academia nació como un proyecto de formación para las familias burguesas de la ciudad de Barcelona. Ésta se encontraba en sus inicios en la Calle Pelayo.
“Ahí estudiaron personajes referentes de nuestra cultura como el arquitecto Batlló o el Marquès Robert”, explica el señor Guiu.
Iniciamos la historia de la Academia Guiu desde su expansión
El proyecto se expandió hasta Passeig de Gràcia que, por aquel entonces, todavía se encontraba en construcción.
De esta forma, la Academia era conocida por formar ingenieros y arquitectos.
«A pesar de las numerosas dificultades que suponían para los catalanes el reconocimiento de su prestigio a otras comunidades españolas en aquellos tiempos«, sostiene Manuel.
A pesar de la época caótica que se estaba viviendo en Cataluña con el desorden social y del acercamiento a la primera guerra mundial, vinieron a la Institución Guiu los padres Escolapios. Impartieron clases de religión y otras materias como filosofía. Cabe mencionar que la primera guerra mundial no afectó gravemente a Cataluña en comparación con, por ejemplo, la guerra civil. No obstante, sí representó consecuencias para la Academia, al llegar alumnos alemanes que huían de la brutalidad de la guerra en su país.
Manuel Guiu, que en ese contexto era amigo del fundador Jesuita de la IQS, Eduardo Vitoria, vio la oportunidad de publicar un libro con sus conocimientos. Esto marcó un punto de inflexión en la historia de la Academia Guiu, dado que así fue como contactó con la editorial Bosch. Manuel Guiu redactó varios libros que difundieron un conocimiento muy preciado por la época en diversas universidades del territorio.
Libros publicados de Manuel Guiu
En busca de cobijo en periodo de guerra
Más adelante estalló la Guerra Civil española y el señor Guiu se trasladó a la Floresta en busca de un entorno más seguro y tranquilo. Allí continuó su obra.
Más adelante, su hijo Francisco Guiu, fue al Frente Republicano y, en consecuencia, terminó en un campo de concentración. Sin embargo, salvó su vida gracias a que fue una persona bien valorada y muy querida, ya que no cesó su pasión por la educación. De este modo, impartió clases enseñando a escribir en la enfermería, a sumar y restar…a sus represores, soldados y cargos.
Fin de la Guerra Civil
Una vez finalizada la guerra civil, llegaría la dictadura, especialmente severa por el territorio catalán. Sin embargo, la familia siguió dando clases y en los años 40 la Academia se trasladaría a Calle Aragón, continuando la labor educativa a la hora de formar profesionales que pudieran aportar sus conocimientos a nuestra cultura. Así como dando consejos para que los alumnos encontrasen el modo de enfocarse correctamente en su futuro profesional.
Fachada de la Academia Guiu en calle Aragón 233
Gente que pasó por las aulas de la Academia Guiu y contactos de referencia
Paralelamente, la Academia fue reconocida por los prestigiosos catedráticos que daban clase en sus aulas: profesionales como Enric Guitón (de la Escuela de ingenieros de Barcelona) quien creó el estadio de la ciudad y gestionó diversas farmacias de renombre. Así como instruyó a Pere Viader (que formó parte del diseño y construcción de las fuentes de Montjuic).
La Academia estuvo constantemente en contacto con la escuela oficial de ingenieros de la Vilanova y la Geltrú, una zona que, teniendo en consideración el contexto, hay que subrayar que se industrializó con mucho éxito y se convirtió en líder. La relación entre ambas instituciones, Escuela de Vilanova y Academia Guiu, fue en consecuencia que los títulos expedidos de Barcelona no tuvieran validez, pero en cambio los de Vilanova sí.
Sin embargo, la preparación en materias de física, matemáticas, tecnologías… de la Academia Guiu era excelente y muchas de las personas que hacían los exámenes en Vilanova, venían a la Academia recomendados por ellos.
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Un cambio de enfoque para la historia de la Academia Guiu
Estos primeros pasos se encontraron obstáculos, puesto que muchos alumnos dejaron de venir al cambiar los planes de estudios de ingenierías (la transición del plan 57 al plan 64).
En consecuencia, Manuel Guiu se vio obligado a realizar cambios y rediseñar su modelo de negocio. De esta forma se produjo una transición gradual más enfocada hacia la formación de Selectividad, un campo en el que poco a poco la Academia se especializó. Abrió un nuevo espectro de materias, buscando nuevos profesores y creando cursos para personas internacionales que quisieran formarse en la ciudad de Barcelona.
Con la apertura de la Academia de Rambla Catalunya Manuel Guiu gestionaría el negocio junto con su hijo Jordi Guiu, hasta que, finalmente, Manuel se jubilara y dejara en manos de su hijo las Academias.
Manuel Guiu asegura que tiene total confianza en su hijo para transmitir los valores de la escuela y sentencia:
“Veo que la Academia se encuentra estable. Aunque los principios no fueron fáciles, gracias al boca a boca, las recomendaciones de las Universidades y nuestra profesionalidad, hemos llevado a la Academia Guiu al éxito”.
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